Introduciéndose al tema de nuestra ley nos trasladamos directamente a la necesidad que acontece actualmente a nivel país: la alta tasa creciente de accidentes, atropellos, muchos de ellos con consecuencias fatales a causa de peatones o conductores irresponsables por falta de educación vial.
Como posible solución a esta situación se han dictaminado leyes para conductores ebrios como la Ley de Tolerancia Cero, Ley Emilia, pero aquellas no logran obtener una gran efectividad a corto plazo ni tampoco parecen tenerlas de cierta medida a largo plazo.
LA FALTA DE EDUCACIÓN VIAL ES INMINENTE, Y LAS ESTADISCTICAS LO INDICAN
La Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito señala que desde el año 2000 al año 2014 los accidentes de tránsito han aumentado de forma considerable habiendo a comienzos de siglo 40.926 a nivel país y el año anterior 78.445 accidentes anuales. Cifra que casi se ha doblado en 15 años y que parece ir en alza.
En base a estos datos oficiales entregados por esta organización nos hacemos la siguiente pregunta, ¿por qué no se logra disminuir considerablemente estas cifras, si se han implementado leyes que buscan disminuirlas pero solo culpan, y no previenen? Hoy en día la mayoría de los ciudadanos chilenos sólo posee una cultura vial expuesta por el curso de conducción y no una prevención ni educación vial desde su etapa estudiantil media, a pesar de que la misma Comisión de Seguridad posea un programa de Seguridad Vial de Estudios el cual ha sido considerado por el Ministerio Educación, pero no es obligatorio y al no serlo el material no llega a ser de interés común entre la comunidad escolar.
¿POR QUÉ EL PROYECTO?
La causa que llega a solucionar el problema con una ley es el impacto actual que tiene la mala cultura vial en nuestro país. Según estadística entregada por Carabineros el año 2014 fue el con mayor accidentes en 6 años "Los malos hábitos, como la imprudencia del conductor, la velocidad y el uso de celulares; junto con la falta de fiscalización son consideradas las principales causas del incremento en las cifras" es por eso que la CONASET ha llamado a avanzar hacia una "Cultura de Seguridad Vial" y en el presente basta con presenciar un noticiero para darse cuenta de la necesidad de educación y cultura vial en Chile, especialmente en los futuros jóvenes, convirtiendo esta ley en una solución a largo plazo.

CITAS Y FUENTES

http://www.latercera.com/noticia/nacional/2014/10/680-601399-9-chile-es-el-pais-con-mayor-tasa-de-peatones-fallecidos-entre-los-paises-de-la.shtml

http://www.conaset.cl/wp-content/uploads/2015/05/Evolucion_siniestros_transito_Chile1972_2014.xlsx

http://www.conaset.cl/archivos/7546.html

http://www.chilevision.cl/noticias/chvnoticias/cazanoticias/cazanoticias-registraron-insolitas-irresponsabilidades-de-los/2015-10-02/222253.html

Para ello hemos desarrollado una propuesta de ley la cual sea obligatoria no solo en la educación básica sino además incluirlo dentro de toda la educación que cada alumnado obtiene en la vida. El proyecto trata en si sobre crear una asignatura adicional a las ya requeridas a nivel escolar básico y medio el cual acredite a final de la enseñanza media un paso adicional para la obtención de la licencia de conducir, para que así aunque el alumno obtenga o no su licencia él pueda estar consciente y capacitado como peatón o como conductor vehicular, y así hacer de un Chile más seguro protegiéndonos a sí mismos.
El objetivo fundamental de esta propuesta consiste en insertar la asignatura “Educación Vial” dentro de la malla curricular chilena con la finalidad de educar, prevenir y culturizar a los futuros jóvenes en etapa escolar donde hoy en día no es obligatoria como se plantea y los únicos medios para aprender normas del tránsito y a conducir son los cursos particulares que ofrecen un servicio bueno, pero caro y no disponible para personas con recursos económicos medios o bajos, en cambio con esta propuesta todos llegarían a obtener una acreditación al momento de obtener su licencia y también un antecedente positivo al curriculum de conductor.
Esta ley no tan solo apunta a los conocimientos básicos que todo alumno debe tener acerca de la educación vial, si no que primordialmente se enfoca en desarrollar una conducta responsable tanto para conductores, ciclistas y peatones; estos últimos con una mayor vulnerabilidad a la hora de tener un accidente en la vía, puesto que carecen de toda protección ante un impacto provocado por una irresponsabilidad propia o de algún conductor. Citando al Ministerio de Transporte junto con CONASET, estos señalaron que Chile fue el país con la mayor tasa de atropellos en países de la OCDE en los últimos 5 años donde fallecieron 3.024 peatones en accidentes de tránsito en Chile, y más de 42.000 resultaron lesionados, cifra que se reduce educando, e incentivando a la cultura vial.
Lamentablemente hoy en día solo el 10% de los chilenos realizo un curso de manejo para obtener su licencia de conducir, y el resto la mayoría no tiene hábitos ni cultura vial, es por eso que el efecto de esta ley busca una solución a largo plazo frente a este tema, porque está enfocada en aquellos jóvenes futuros conductores de las carreteras nacionales que podría obtener una orientación vial gratuita.
Combatir la imprudencia, la agresividad e irresponsabilidad de los conductores es posible educando, principalmente desde edades tempranas en adelante, fomentando seguridad vial, cuestión que según ingenieros en tránsito, es de mucha falta en la actualidad.
La aprobación de la asignatura acredita un 50% la obtención de la licencia de conducir a futuro, promediándose con el test posterior que realizará el futuro conductor en el respectivo lugar de práctica de manejo, destacando que la ayuda del Ministerio de Transportes y el Ministerio de Educación son esenciales para el desarrollo de esta tramitación.