Según el artículo 394 del Código penal de Chile, el infanticidio tiene una pena de presidio mayor en su grado de mínimo a medio, por ende el asesino pasa entre 5 años y 1 día a 10 años y 1 día si es que su pena sea de grado mínimo, y 10 años a 15 años si es grado medio.
A pesar de la gravedad que implica matar a un infante, la ley no pone mano dura en comparación con las penas de parricidio y femicidio. Nótese que un parricidio tiene como pena el presidio mayor en su grado máximo a presidio perpetuo calificado, es decir entre 15 años y 1 día a 20 años y un día de presidio, y solo a los 40 años cumplidos de la condena pueden optar por algún beneficio.
Consideramos que ésta diferencia en las penas es injustificado, ya que la pérdida de un niño daña de igual manera que la pérdida de la madre o un padre.
Con este proyecto de ley, queremos hacer una modificación en las condenas de este delito que afecta a toda la sociedad en su conjunto. Equiparar las condenas nos parece una opción óptima para hacer justicia a todos esos niños que son lamentablemente víctimas de este terrible y repudiable acto de crueldad.

Artículo 394.- Introdúcense la siguiente modificación en el Código Penal:

1) Sustitúyese "pena de presidio mayor en su grado mínimo a medio" por "presidio mayor en su grado máximo a presidio perpetuo calificado".