Colegio De La Salle Talca -TALCA - Región del Maule


Título iniciativa:

Mensaje: REFORMA A LOS PROGRAMAS DE REINSERCION SOCIAL Y FISCALIZACION DE BIENES DESTINADOS A CARCELES CHILENAS



Propuesta legislativa:

Según
el Instituto Latinoamericano para la Prevención del Delito y el
Tratamiento del Delincuente del año 2009, en Chile; por cada 100 mil
habitantes, hay 318 recluidos, mostrándonos que somos el país con más
reos en Latinoamérica respecto a su población.

Según la base de
estadísticas de Gendarmería, el 50% de los reos vuelve a cometer
delitos, y esto se da para el 60% de nuestras cárceles. Esta cifra se
debe a los bajos porcentajes de penados que pueden acceder al sistema de
reinserción y rehabilitación social actual, volviéndose contradictorio,
ya que el presupuesto que se invierte por reo, supera al sueldo mínimo
chileno en la mayoría de las cárceles de Chile.


Según la ley N°
409 del Código Penal, los objetivos de un recinto penitenciario son: la
privación de libertad, la rehabilitación y la reinserción social de un
reo. Sin embargo, ha quedado demostrado que esta reinserción no está
siendo eficiente, lo que puede entenderse como producto de múltiples
razones:


- Dentro de los recursos que el estado proporciona
para la mantención y funcionamiento de las cárceles, solo el 1,81% de
ellos se destina a programas de rehabilitación y reintegración del
penado, teniendo en cuenta también, que no se realiza ninguna
fiscalización ni regulación del dinero.

- En materia educacional,
más del 40% de los reos, no tiene la educación necesaria para poder
reintegrarse en el mercado laboral. A esto le sumamos el estigma social
con el que queda la persona que cumplió pena por delito cometido.

- Las cárceles tampoco cuentan con programas de asistencia sicológica, que es un aporte importante en la rehabilitación.


En nuestro país existen planes de reinserción social como el Programa
CET, Programa Laboral en el Medio Libre y la línea de intervención Hoy
Es Mi Tiempo. Este último aborda tres niveles: Individual, Familiar y
Laboral/Educativo. En cada uno se desarrolla un proceso de

acompañamiento, contención y seguimiento permanente al usuario durante
un período de 9 meses. Creemos que sería favorable que se amplíe el rango

de edad, que actualmente es hasta los 35 años, y que se aumente el
número de beneficiados (que hasta ahora son entre 200 o 300 reos por
cárcel).


Si mejorara el sistema de reinserción, o sea existiera
un menor número de reos, los dineros invertidos por cada uno, que
correspondería entre $170.000 y $550.000, podrían invertirse en otros
ámbitos. Por lo tanto, frente a esta problemática, postulamos la
redistribución de los recursos que reciben las penitenciarías chilenas,
administrados por Gendarmería de Chile, enfocándonos en aumentar el
capital que va dirigido al funcionamiento de los programas de
reinserción presentes en las mismas. La mejora de estos se lograría bajo
la implementación de las siguientes medidas:


- En primer
lugar, basándonos en el programa descrito anteriormente “Hoy es mi
Tiempo”, agregaríamos una evaluación rigurosa y se discriminaría quienes
serían partícipe de estos programas, según el tipo de pena efectiva, el
establecimiento del nivel de peligrosidad y el comportamiento que
presente dentro de la institución penitenciaria; una vez inserto en
alguno de estos programas se procederá a la determinación de la
capacidad de respuesta del usuario frente a la intervención.



-Dentro de los programas, asegurar la existencia de un equipo
multidisciplinario que participe de manera activa en la rehabilitación,
siendo estos mismos los que evalúen, en conjunto con gendarmería,
quienes serían los presuntos beneficiados; refiriéndonos más
específicamente a psicólogos, siquiatras, asistentes sociales y
evaluadores certificados que contribuyan de forma positiva a la
rehabilitación.


-Implementar un perfeccionamiento inmediato de
los programas para combatir la adicción a las drogas, considerando que
un gran porcentaje de los delitos cometidos son realizados bajo el
consumo de estas. Esta mejoría se produciría desarrollando una amplia
coordinación de redes y presupuestos con otros organismos responsables
de la cuestión, dígase MINSAL, SENAME y SENDA.


-Agregar dentro de las cárceles programas de diferenciales de contención para los reos que tengan grado de deficiencia mental.


-Ampliar el número de redes de empresas privadas con los recintos
penitenciarios y gendarmería, que contribuyen de forma positiva a la
reintegración de los reclusos en el mercado laboral.

Todos
estos postulados suponen estar estrictamente sujetos a una fiscalización
constante que asegure el buen uso de los recursos dirigidos a las
penitenciarías, para así esperar un mejor resultado de rehabilitación
penal y una disminución del índice de delincuencia en nuestro país.